La mejor tarjeta gráfica por menos de 100 euros

A la hora de actualizar un equipo para jugar la compra de una GPU nueva suele ser la opción mayoritaria, aunque la amplia oferta del mercado actual puede complicar enormemente la elección, sobre todo si tenemos presupuestos reducidos y no conocemos realmente las prestaciones de cada modelo y los renombres.

Por ello hemos decidido hacer una nueva guía en la que os ayudaremos a elegir la mejor tarjeta gráfica por menos de 100 euros, un margen en el que actualmente se mueven muchos usuarios y que ciertamente nos permite acceder a opciones bastante capaces y potentes.

Para que no tengáis dudas repasaremos las especificaciones de las dos mejores tarjetas gráficas disponibles por menos de 100 euros, daremos una idea general del rendimiento que podemos esperar de ellas y diremos para que tipo de resoluciones resultan más apropiadas de media, eligiendo la mejor opción precio-prestaciones.

Sin más entramos en materia y como siempre os animamos a dejar cualquier duda o cuestión que os ronde por la cabeza en los comentarios.
GTX 650 Ti.





Es una solución de la generación anterior y está basada en Kepler, aunque podemos encontrarla por un precio bastante atractivo, ya que su versión con 2 GB de GDDR5 arranca desde los 90,77 euros.

Especificaciones:
768 shaders o núcleos CUDA.
64 unidades de textura (TMUs).
16 unidades de rasterizado (ROPs).
Bus de 128 bits.
2 GB de GDDR5.
Necesita fuente de 400W mínimo y alimentación extra por conector de 6 pines.

Rendimiento:

Vamos a dar una visión global de qué podéis esperar de esta tarjeta gráfica, acompañada de una gráfica con algunos datos de rendimiento.

En la mayoría de juegos actuales no tendremos problemas para activar un nivel de calidad alta y mantener resoluciones 1080p, así que por ese precio es una compra recomendable.

A ejemplos comparativos podemos tener claro que esta GPU es bastante más potente que la que utiliza Xbox One. En la gráfica podéis ver algunos resultados de pruebas de rendimiento, cortesía de Anandtech.


R7 250X.



Es una versión renombrada de la Radeon HD 7770 con un pequeño aumento en las frecuencias de reloj, por lo que su rendimiento no dista mucho del que ofrecía aquella.

Por desgracia el precio de esta tarjeta ha engordado bastante, tanto que no he conseguido encontrar ninguna nueva por menos de 91,92 euros.

Especificaciones:
640 shaders o procesadores de flujo.
40 unidades de textura (TMUs).
16 unidades de rasterizado (ROPs).
Bus de 128 bits.
1 GB de GDDR5.
Necesita una fuente de 400W y conector de alimentación adicional de 6 pines.

Rendimiento:

En juegos especialmente optimizados para AMD, como por ejemplo Battlefield 3 y 4, esta tarjeta gráfica muestra su mejor cara, aunque podemos decir que por lo general es suficiente para jugar con ciertas garantías en la mayoría de juegos actuales a 1080p con calidad media o alta, dependiendo del juego en concreto.

La gráfica que acompaña a la noticia muestra una breve comparativa de esta tarjeta frente a la GTX 650 Ti, representada en color azul, mientras que la R7 250X es la de color rojo.

Como podemos ver el rendimiento de la GTX 650 Ti es, salvo excepciones contadas, muy superior a la solución de AMD.


Conclusiones:

Relación calidad-precio la GTX 650 TI es la mejor opción de las dos, sobre todo teniendo en cuenta el precio al que podemos encontrarla ahora que muchos están limpiando stock, así que si vuestro presupuestos no os permite pasar de los 100 euros deberíais optar por dicha tarjeta gráfica sin ningún tipo de duda.

Por otro lado debéis tener en cuenta también que dicha tarjeta no es nada exigente con la fuente de alimentación que necesita para funcionar, así que no deberíais tener problema.

Finalmente un apunte claro, y es que no merece realmente la pena actualizar a algo inferior a las dos tarjetas que hemos elegido, ya que las diferencias de precio son mínimas pero la pérdida de rendimiento considerable si bajamos, por ejemplo, a una GT 740 o a una Radeon R7 250.
Opciones alternativas

Para que la guía resulte un poco más completa hemos creído conveniente recoger otras dos opciones interesantes que superan por muy poco los 100 euros, puesto que es probable que muchos no tengáis problema en hacer ese pequeño desembolso extra.

R7 260X



Es un poco más potente que la GTX 650 Ti, aunque en juegos especialmente optimizados para AMD llega a sacarle una ventaja considerable.

De nuevo estamos ante una GPU más potente que la que utiliza Xbox One, cuyo precio arranca desde los 108,70 euros en su versión de 1 GB.

Especificaciones:
896 shaders o procesadores de flujo.
56 unidades de texturizado (TMUs).
16 unidades de rasterizado (ROPs).
Bus de 128 bits.
1 GB de GDDR5.
Requiere fuente de 450W y conector de alimentación de 6 pines.

Rendimiento:

En la gráfica podemos ver una comparativa frente a la GTX 650 Ti, representada en rojo. La diferencia de rendimiento a favor de la R7 260X es clara, así que como anticipamos es una gran opción.

Podemos esperar fluidez en 1080p con calidad alta o incluso ultra en juegos puntuales.


GTX 750



Una solución muy equilibrada entre rendimiento, precio y consumo, ya que podemos encontrarla por 105 euros en su versión de 1 GB de GDDR5 y, ciertamente, para este tipo de tarjetas gráficas no necesitamos realmente más memoria de vídeo.

Estamos ante una versión recortada de la GTX 750 Ti y su rendimiento es, por tanto, inferior, pero capaz de aguantar el tipo sin problemas con juegos actuales y resoluciones 1080p.

Especificaciones:
512 shaders o núcleos CUDA.
32 unidades de texturizado (TMUs).
16 unidades de rasterizado (ROPs).
Bus de 128 bits.
1 GB de GDDR5.
Necesita una fuente de 300 W, sin conector de alimentación adicional.

Rendimiento:

Como podemos en las gráficas que acompañamos, también cortesía de Anandtech, la GTX 750 es capaz de ofrecer casi el mismo rendimiento, de media, que la R7 260X, pero con un consumo mucho menor y un funcionamiento mucho más fresco.

No tendremos problema para jugar con ella en 1080p y calidad alta o ultra según cada juego en concreto.